Serie: Cuentos de Luz
Narrativa: Storytelling Lunar infantil con ciencia escondida
Érase una vez…
una Luna redonda y brillante
que giraba feliz alrededor de la Tierra.
Cada noche, se ponía su mejor cara
para que todos en la Tierra la vieran desde sus camas:
los búhos, los gatos, los niños y hasta los grillos.
Pero había un secreto que nadie sabía…
La Luna…
¡Se estaba separando!
Muy, muy despacito,
como si no quisiera que nadie lo notara,
cada año daba un pasito más lejos.
¡Apenas 3.8 centímetros!
—¡Es como si estuviera creciendo de talla de zapato! —dijo un astrónomo con una gran lupa y una sonrisa.
Y tenía razón.
La Luna había empezado a sentir que sus zapatitos celestes…
le apretaban un poco.
—Ay… —decía rascándose la superficie—.
Con tanto girar, ¡estos zapatos me quedan pequeños!
Así que un día decidió:
—¡Quiero unos un poquito más grandes!
Y empezó a alejarse,
muy poquito, muy lentamente,
como quien da un pasito atrás para estirarse mejor.
🌍 Mientras tanto, la Tierra la miraba con cariño.
—¿Te vas, Lunita?
—No me voy, no te preocupes —respondía la Luna desde el cielo—.
Solo me estoy dando espacio…
¡para crecer!
Y aunque se alejaba un pelín cada año,
seguía saludando cada noche.
Salía por el este, brillaba como siempre,
y a veces se escondía solo para jugar al escondite lunar.
La gente empezó a notar cosas raras…
—¿No parece que las mareas cambian un poco?
—¿Y si un día se aleja tanto que no vuelve?
Pero la Luna los tranquilizaba desde allá arriba:
—¡No me iré muy lejos!
Solo estoy creciendo, como crecen los niños,
como crecen los pies…
Como crecen los sueños.
🌒 Y así, año tras año,
la Luna se prueba un nuevo par de zapatitos espaciales,
un número más grande cada vez.
Y aunque algún día estará tan lejos que los eclipses ya no serán iguales…
nunca dejará de ser nuestra Luna.
La que baila en el cielo.
La que guía las mareas.
La que se escapa…
poquito a poquito.
🌙 Astrometáfora
Hay cosas que se alejan sin irse.
Crecen. Cambian. Se estiran con el tiempo.
Como la Luna.
Como tú.
Y aunque parezca que se escapan…
siguen ahí,
brillando desde un poquito más lejos,
esperando que tú también crezcas.
Comentarios